Normalmente, cuando se tiene que realizar una nueva web o actualizar la
existente, tenemos que llevar especial cuidado a los planteamientos que se
hacen. Sobre todo si no tenemos idea de cómo funciona una web y como nos puede
afectar, sobre todo en lo negativo.
Debemos de ser cautos y no
dejarnos llevar por la emoción del momento o por impresionantes diseños que
hemos visto en otras webs y que nos han fascinado.
Una mala decisión puede conllevar que dé como resultado un gasto realizado
innecesario y baladí, además de no cumplir con los objetivos reales que deberíamos perseguir.
Lo lógico es plantearnos nuestros
objetivos. Hay que meditarlos y tener en cuenta los datos estadísticos con los
que contamos. Tendríamos que pensar:
- ¿Para qué quiero esa web?
- ¿Cuánta gente la ve?
- ¿Cómo acceden a la web? (Móvil, Tablet, PC,…)
- ¿Importa más el diseño o acceder de forma correcta al contenido?
- ¿Tengo redes sociales? ¿Cómo las gestiono?
- ¿De qué tipo de empresa se trata?
- ¿Cuáles son los productos o servicios que vendo?
- ¿Quiénes son mis usuarios o clientes? (Edad, sexo, nivel educativo,…)
- ¿Existe ya una web de la organización?
- ¿Algún otro tipo de presencia online (Redes sociales, perfiles en directorios, …)?
- ¿Quién es la competencia?
- ¿Por qué cambiar o crear la web?
- ¿Qué es lo mejor y lo peor de la web actual?
- ¿Qué tiene la competencia que queramos tener nosotros?
- Estadísticas que tenemos y que queremos medir
- Objetivos. ¿Cuáles son y cómo se medirán?
- Contenido multimedia: Videos, Imágenes y textos
- Guía de estilo: colores, logotipo, diseño, formatos,…
- Ejemplos de diseños que gustan (o disgustan), pero que no sabes si le gustará a tu público objetivo
- Presupuesto y plazo de realización de la nueva web
- Características técnicas
- Funcionalidades que debe de tener
- SEO, Hosting y dominio
- Cuanto me va a costar mantenerla
- Cada cuanto voy a realizar publicaciones nuevas y de que tipo
20 Preguntas para responder ANTES de hacer un sitio web
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